La tarea de los abuelos ha llegado:

UNICEF informó  hoy, 28 de Mayo,   que 86 millones de niños caerán en la pobreza a causa de los problemas económicos que vienen como consecuencia de la pandemia, y lo peor es que sabemos que  el hambre  trae secuelas para toda la vida.

Esta situación obligará a  ambos padres a trabajar para traer el sustento para sus hijos, como ya muchos lo están haciendo. Según la Unicef habría que priorizar el alimento, el vestuario y la educación de los niños; se hace necesario entonces volver a lo importante.

El refugio más inmediato y más seguro es la familia, y dentro de ella hay que darle una real consideración a la presencia de los abuelos, quienes pueden tener un rol muy importante en estos días.

 Las cuarentenas nos han dejado muchas lecciones, desde el dolor de la incomunicación podemos darnos cuenta del valor que tiene la palabra,  el verbo, porque a través de ella podemos  conocernos más, amarnos más, cultivar sentimientos a veces olvidados, tener nuevas experiencias afectivas, podemos emocionarnos, la palabra puede fluir dando vida al que no tiene. Gracias a Dios que no está presa. Y uno de los milagros que el lenguaje ha hecho es, conocer y valorar aún más la presencia de los abuelos en la familia,  porque la incomunicación física ha sido dolorosa por no poder abrazar ni besar a los que amamos, pero una sola palabra nos hace suspirar, un gesto, un emoticón  a veces es suficiente para saber  lo que sucede en el otro corazón.

     En un hogar donde existen los abuelos podemos comprobar diversos beneficios,  porque ellos no  sólo  transmiten sabiduría y experiencia a sus nietos,  sino que también aportan tranquilidad y estabilidad.   Además los abuelos también se enriquecen al estar en contacto directo con los hijos de sus hijos.

    Un nieto que mantiene una relación habitual con sus abuelos creará con ellos un fuerte vínculo afectivo. Les ayudará a mantener su equilibrio emocional al sentirse protegidos y considerados. “Un abuelo puede servir como un modelo para aprender cómo hacer frente a la adversidad y las dificultades en la vida”, señala Dan Kindlon, un conocido psicólogo infantil . Los abuelos ayudan a los nietos a fomentar la resiliencia y a aprender a sobreponerse en situaciones difíciles como el divorcio de los padres o una enfermedad de un familiar,  Influyendo  también positivamente en sus valores y comportamientos.

   También “Es de gran importancia la relación entre padres y abuelos para mantener las relaciones positivas intergeneracionales. También lo es  la frecuencia de contacto y la realización de actividades de acompañamiento como conversar, pasear, visitar a familiares y amigos, discutir y tomar decisiones importantes”, concluye el estudio realizado por la Universidad de Valencia.

   La mayoría de los abuelos presentan su cara más lúdica y divertida con sus nietos. Lo que no han podido disfrutar en su juventud o con sus hijos debido a sus obligaciones laborales, lo intentan hacer con ellos. Les encanta llevarlos a pasear por el parque, ir a ver una película infantil o a una obra de teatro, así como enseñarles todos los juegos de su época, como  el dominó, el ajedrez, el ludo,  y otros. Además de ser una experiencia enriquecedora para los niños y jóvenes de cualquier edad, les ayuda a desconectarse un poco  de la tecnología.

.Se constituyen en  un ejemplo a seguir, porque les comparten sus testimonios, experiencias y vivencias de una vida de trabajo y apoyo a la familia. Los escuchan y los animan a trabajar y a esforzarse para conseguir resultados en la vida y para que se den cuenta que tienen un hogar seguro y estable en el que pueden desarrollar todas sus habilidades.

  Los  abuelos que tienen una buena relación con sus nietos  suelen padecer menos depresiones, según estudios sobre el envejecimiento, por lo que el beneficio es mutuo, porque influye también  en el bienestar psicológico de los nietos  hasta su edad adulta.

 En estas dos épocas de la vida ,  como niños y como abuelos, la seguridad y el afecto que ellos  se dan son imprescindibles. Los niños revitalizan y rejuvenecen a sus abuelos,  haciéndolos más activos  y felices porque vuelven a sentirse necesarios y a veces imprescindibles.

  Los abuelos son un  arma poderosa que nos permitirá traspasar de generación en generación nuestras convicciones nuestros hábitos y nuestros valores trascendentes.

         Un gran ejemplo bíblico tenemos cuando Pablo le dice a Timoteo su discípulo: “…Traigo  a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida y en tu madre Eunice….”

        Un claro ejemplo de la eficacia que tiene el traspaso generacional de los valores éticos y espirituales a través de los abuelos.

         En los momentos  que estamos viviendo , la presencia y el servicio que puede entregar un abuelo en una familia es  trascendente, porque tendrá la tarea que sus padres no podrán entregar en la forma adecuada  a sus hijos, valorémoslos , porque aunque sean débiles, y tengan poca fuerza siempre tendrán alguna palabra de sabiduría.

    El Rey David oraba de esta forma:

“Oh Dios, no me deseches en el tiempo de la vejez, cuando mis fuerzas se acaben  no me desampares”.

“Aún en la vejez y las canas, oh Dios no me desampares, hasta que anuncie tu poder a la posteridad y tu potencia a todos los que han de venir”

Ahora, escucha a tu abuelo, el seguramente tiene mucho que enseñar, y transmitirte sus experiencias de vida, dale una oportunidad.

Por: Rosario Villaseñor

1 comentario en “La tarea de los abuelos ha llegado:”

  1. Nancy Montoya Ormeño

    Ser abuela es hermoso es la continuidad de los hijos la descendencia sin duda tenemos mucho que aportar en cariño y experiencia a los nietos
    . Uno de los problemas que más alteran la relación entre los abuelos y los padres de sus nietos es la aplicación de los límites. … Me paso con mu madre, pero sin ella no hubiera podido trabajar, criar a mi hijo, nu lograr muchas cosas, como estudios, casa etcétera.
    Gracias por sus consejos, espero no caer en ese mismo error.

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