Cuenta la historia que corría el año 2015 cuando Bill Gates, declaraba en base a la información privilegiada que maneja por su permanente contacto con instituciones científicas a las que financia en sus investigaciones, que lo único que podía matar a millones de personas serían microbios, y no una guerra de misiles y armas continentales letales. El responsable sería un virus infeccioso que en su propagación superaría la capacidad de reacción de los países y las organizaciones científicas internacionales de investigación, agravado además por la falta de epidemiólogos, y la ausencia de protocolos de procedimientos para enfrentar una pandemia.
Las predictivas, y certeras palabras del fundador de Microsoft hoy cobran valor, cuando el mundo se ve afectado por el Coronavirus que se ha transformado en una Pandemias de alcances globales. Cuando creen en algunos países que está controlada por un descenso en el número de contagiados, aparecen rebrotes que obliga a volver a severas medidas de confinamiento que está causando daños psicológicos a una parte importante de la población, además del daño a la economía de los ciudadanos del mundo. Los gobiernos han ido a socorrer a sus habitantes, pero esa ayuda por tiempo indefinido es imposible, y más temprano que tarde deberán aflojar los controles para que las personas vuelvan a trabajar o buscar trabajo.
Pero Bill Gate no conforme con su primera y certera predicción ha dicho con optimismo a lo que puede ocurrir si llegara en el futuro una nueva afección global. «Dentro de tres años estaremos listos para la próxima pandemia» Esto lo expresó entrevistado por la editora en jefe del sitio National Geographic, Susan Goldberg.
Si hay un tema importante es la distribución de la vacuna, que será la única herramienta según Bill Gate para controlar la pandemia actual.
Es evidente que los países que han invertido cifras millonarias, para desarrollar una vacuna, querrán una vez probada y aprobada se aplique en sus ciudadanos, y el resto de las vacunas para los países más pobres. Es muy probable que este desequilibrio se produzca, y que muchos países ante la falta de recursos facilitarán voluntarios de su población para probar una vacuna.
Gates explicó luego que no realizar una distribución equilibrada de las vacunas sería «un doble error», porque «no solo estarías sacrificando esas vidas, sino que mientras permitas que la enfermedad exista fuera de Estados Unidos o en cualquier parte del mundo, volverá y no podrás reanudar tu actividad normal».
Los hechos actuales que afectan al mundo es el resultado del actuar de algunos países, y de algunos multimillonarios, que a través de sus fundaciones incentivan investigaciones que encuentran científicos muy poco éticos, y que no tienen impedimentos en traspasar limites, siempre con la excusa que es por la ciencia para desarrollar vacunas, medicamentos o tratamiento para paliar dolores, para erradicar enfermedades genéticas o provocadas por agentes patógenos
Lo que no consideran los científicos y sus financista es la Naturaleza, origen y causa de todo lo manifestado, y que tiene finalmente algo que decir, así nos guste o no, ella se impone, no busca ni la aprobación ni los votos de nadie, simplemente Actúa.

Somos un conjunto de ciudadanos, padres y madres, que frente a la política estatal de implantación de la ideología de género en la educación chilena, y consientes del derecho originario, natural y constitucional de los padres a ser los primeros educadores de sus hijos, nos unimos para exigir el respeto a este derecho inalienable, por parte del Estado, y de cualquier persona natural o jurídica, que nos lo conculque o incurra en omisiones que signifiquen lo mismo.